domingo, 3 de noviembre de 2013

Comunicaciòn

El otro día le pregunté a mis hijos, (chico y chica), de como les estaba yendo, en sus estudios, como se llevaban con sus compañer@s de clase, con sus profesores etc.
Sus respuestas, al unísono fue un ¡¡¡gñrfrfs!!!.
Ya por la noche, mientras estaba en el ordenador, entré por casualidad en esas redes sociales, (Myspace, Facebook), y adivinad lo que me encontré.
"Buen invento eso de las redes sociales". Ya no necesito preguntarles a mis hij@s algo de sus vidas, basta que entre allí y se con quien salen, donde van, como se llevan con los demás, como se comportan en la escuela, que notas tienen,, y hasta, (en el caso de mi hija), su ciclo menstrual.
Incluso supe de que manera y porqué me había desaparecido cierta cantidad de dinero de mi bolsillo.
¿Hablar con ell@s?. ¿Comunicarme con ell@s?. ¿Para qué?. Basta con que entre al Myspace o al Facebook, y lo se todo de ell@s.
Si. Muy buen invento es ese. El único problema que tengo en estos momentos, es que veo que tengo unos 50 amigos, pero:
¿A quién m.... le pido un cigarrillo?.
Hablándo de a quién le pido un cigarrillo, el otro día hubo una ""quedada".
¿Una qué?. Dirá usted. Si, una quedada, digamos que es una reunión real, con personas reales, de un mundo real, que se reunen en un lugar real, y que provienen de un mundo virtual, con personas virtuales, que mantienen comunicación virtual en reuniones virtuales, solo que han "quedado" para conocerse, o verse realmente las caras.
Aunque lo más triste de las "quedadas", es leer aldía siguiente en el foro, lo magnífica y multitudinaria que fue, cuando tu sabes que fuiste el único que asistió.
Pero claro. Eso no se puede decir.

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